¿Para qué sirve la duloxetina?
La duloxetina es un medicamento que pertenece a la clase de fármacos llamados inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina y norepinefrina, que se emplea para tratar la depresión en adultos y el trastorno de ansiedad generalizada (TAG) en adultos y niños de 7 años o más. Al ser un antidepresivo, se debe tomar siempre bajo la supervisión del médico, pues se ha demostrado que algunos niños, adolescentes y adultos jóvenes pueden desarrollar tendencias suicidas al consumir este y otros antidepresivos. Por este motivo, a continuación te invitamos a conocer más sobre este fármaco: cómo funciona, cuáles son sus efectos adversos y quiénes no deberían tomarlo.
¿Qué es la duloxetina y para qué sirve?
Este fármaco es un antidepresivo que se usa, principalmente, para tratar la depresión y la ansiedad. No obstante, también suele emplearse en el tratamiento del dolor generado por un daño en los nervios, como el que se presenta con la neuropatía periférica diabética. Asimismo, se emplea para tratar la fibromialgia, padecimiento que genera dolor y rigidez muscular, así como el dolor crónico que se presenta en músculos y huesos, generados por la osteoartritis.
¿Qué efecto tiene la duloxetina?
La duloxetina pertenece a la familia de medicamentos llamados inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina y norepinefrina, por lo que se cree que actúan al aumentar la actividad de sustancias químicas (serotonina y norepinefrina) y controlar los síntomas.
Es bien sabido que para obtener los beneficios completos de este medicamento pueden pasar de una a cuatro semanas. Asimismo, se sabe que si se deja de tomar repentinamente puede provocar síntomas de abstinencia, tales como: náuseas, vómitos, diarrea, ansiedad, mareos, irritabilidad. Por ello, no se debe dejar de tomar sin consultar al médico. Para suspender su uso, el profesional de la salud reducirá la dosis de forma gradual.
¿Cómo se debe tomar la duloxetina?
Este medicamento requiere receta médica para su consumo y viene en una presentación de cápsulas de liberación prolongada. Su uso depende de la enfermedad que se desea tratar, por ejemplo: cuando se utiliza para tratar la depresión, por lo general se consume de una a dos veces al día con o sin alimentos. En los casos, en los que se desea tratar la ansiedad generalizada, neuropatía diabética, fibromialgia o dolor continúo, generalmente, se toma una vez al día.
Algunas recomendaciones que se deben saber antes de consumir duloxetina son:
- Toma la duloxetina todos los días a la misma hora.
- Sigue las instrucciones del médico cuidadosamente, no aumentes o disminuyas la dosis sin consultarlo con él.
- Consume este fármaco sólo el tiempo recomendado por el médico.
- Nunca tomes dos dosis al mismo tiempo para compensar la que se te olvidó.
- Toma la dosis olvidada tan pronto como lo recuerdes; sin embargo, si faltan menos de cuatro horas para la próxima dosis, lo mejor es omitir la dosis olvidada.
¿Cuánto tiempo se puede tomar la duloxetina?
Por lo general, para que este fármaco surta su efecto por completo puede tomar entre una y cuatro semanas. El tiempo de uso lo determinará el médico y dependerá del paciente y el padecimiento que se desea tratar. No obstante, en los casos que se usa para la neuropatía diabética se recomienda suspender su uso si a los dos meses de comenzar a consumirlo no se han visto resultados favorables.
¿Quiénes no pueden tomar duloxetina?
Aunque este fármaco suele ser bien tolerado por adultos mayores de 18 años, se sabe que no es adecuado para algunas personas, como por ejemplo:
- Aquellos que han tenido una reacción alérgica a la duloxetina
- Quienes tiene problemas de riñón, hígado o corazón
- Pacientes que han tomado otros antidepresivos en los últimos 14 días
- Personas que tienen glaucoma, debido a que puede aumenta la presión del ojo
- Aquellos que tienen trastornos bipolar, episodios maníacos y convulsiones
- Las mujeres que están tratando de quedar embarazadas o que están embarazadas o en el periodo de la lactancia.
¿Cuáles son los efectos secundarios de la duloxetina?
Los efectos adversos de este fármaco pueden clasificarse de la siguiente forma:
Efectos adversos muy frecuentes (más de 1 de cada 10 personas) | Efectos adversos frecuentes (1 de cada 10 personas) | Efectos adversos poco frecuentes (1 de cada 100 personas) |
Dolor de cabeza Malestar Náuseas Sequedad en la boca | Pérdida de apetito y de peso Dificultad para dormir Sensación de agitación Disminución del deseo sexual Ansiedad o dificultad para tener un orgasmo Sueños inusuales Mareos Sensación de lentitud Temblores Adormecimiento Visión borrosa Percepción de sonidos en el oído cuando no hay sonido en el exterior (acúfenos) Palpitaciones en el pecho Aumento de bostezos Estreñimiento Diarrea Dolor de estómago Dolor muscular Dolor al orinar Caídas Disfunción erectil | Inflamación en la garganta y ronquera Pensamientos suicidas Rechinar los dientes Sentido de desorientación Espasmos involuntarios en los músculos Nerviosismo Cambios en el sentido del gusto Problemas para controlar los movimientos, así como falta de coordinación Dilatación de pupilas Vértigo Dolor de oído Espasmos de la garganta Vómitos con sangre Sudores nocturnos Sensibilidad a la luz solar |
Este fármaco es efectivo para tratar algunos padecimientos. No obstante, su uso debe ser recomendado y supervisado en todo momento por el médico tratante para evitar efectos adversos graves.
Con información de NHS.uk, Mayo Clinic, Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios y la Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU.