¿Beber agua fluorada en el embarazo disminuye el IQ de los recién nacidos?

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Un nuevo estudio de la Toronto’s York University, publicado en la revista JAMA Pediatrics, mostró que los hijos de mujeres que tomaron agua fluorada del grifo durante la gestación tienen un IQ más bajo.

Los investigadores partieron del hecho de que el agua fluorada se ha utilizado por décadas en comunidades de Estados Unidos, Canadá y ciudades europeas.

Desde entonces, algunos han enfocado sus esfuerzos a conocer los efectos del flúor como un elemento tóxico que afecta el desarrollo mental, los neurotransmisores y el sistema nervioso. Sin embargo, ninguno —salvo una investigación en Estados Unidos—, habían puesto atención en la cognición y desarrollo fetales.

Los científicos canadienses trabajaron con datos recolectados por el programa Maternal-Infant Research on Environmental Chemicals (MIREC).

Para el MIREC, se reclutaron a dos mil un mujeres embarazadas de las 10 ciudades más importantes de Canadá (entre ellas: Vancouver, Montreal, Kingston, Toronto, Hamilton y Halifax).

El proyecto corrió a cargo del departamento de salud pública de Canadá e incluyó a mujeres que tuvieron hijos entre 2008 y 2012.

Descartaron a quienes reportaron anormalidades fetales, complicaciones médicas, o que habían consumido sustancias ilícitas durante la gestación.

De la muestra, los canadienses solo analizaron la información de las consumidoras de agua fluorada del grifo.

En total, se compararon datos de 512 mujeres; 400 de ellas vivían en lugares con flujo de agua fluorada.

Para calcular las cantidades de fluoruro ingerido, registraron los niveles de las plantas de tratamiento ligadas a los códigos de las participantes.

De igual manera, tomaron pruebas de orina cada tres meses durante el embarazo. El análisis se realizó en la Indiana University School of Dentistry.

Los resultados arrojaron que aumentar un miligramo de flúor por litro al día se asocia a una baja de 4.5 puntos en el IQ de los niños; aunque en las niñas no se observó ninguna modificación.

La evaluación de IQ se realizó con las pruebas del Wechsler Primary and Preschool Scale of Intelligence-III a los menores de entre 3 y 4 años.

Dichos exámenes incluyeron: razonamiento verbal y comprensión; razonamiento no verbal; procesos espaciales; habilidades motoras y visuales.

Salud bucal y agua fluorada

Las caries dentales y la enfermedad periodontal tienen alta prevalencia en México y el mundo.

Para evitar ese tipo de padecimientos y para incrementar la resistencia del esmalte dental a la desmineralización, se recomienda el uso de flúor.

A pesar de ello, y del reconocimiento del flúor en la salud dental, la preocupación por sus efectos se está volviendo más fuerte. En especial porque hay países en donde ha habido un incremento de fluorosis (cantidad excesiva de fluoruro durante el periodo en que los dientes se forman).

Asimismo, se ha hablado de sus consecuencias neurotóxicas y cancerígenas. No obstante, los expertos en salud de la American Academy of Pediatrics, de Estados Unidos, y la American Dental Association, sugieren el uso de fluoruros en pastas y geles dentales para prevenir el daño a la dentadura.

Estas instancias señalan que los hallazgos de la Toronto’s York University deben considerarse con precaución; ya que, hasta ahora, no han sido replicados ni han obligado a modificar las recomendaciones acerca del consumo de fluoruro.

David Bellinger, especialista en neuroepidemiología en el Boston Children’s Hospital, declaró a The Washington Post que el estudio canadiense tiene varias debilidades; pues su método es similar a las investigaciones que muestran bajas toxinas de pesticidas.

John Ioannidis, de Stanford University, también señaló que, a nivel estadístico, es muy limitante; y sentenció que no encuentra razón para que los niveles de IQ solo se alteraran en los niños y no en las niñas.

Aunque hay opiniones positivas al respecto, expertos entrevistados por The Washington Post indican que la decisión de detener el consumo de agua del grifo —en especial en comunidades donde es la opción más saludable y responsable—, no debería basarse en un solo artículo.

Por supuesto, también reconocieron que este tipo de miradas muestran que la salud bucal va más allá de los problemas dentales, y que es necesario revisar cómo impacta en el desarrollo y aprendizaje durante la niñez.