¿Qué es la ketamina?
La ketamina es un anestésico de efecto rápido, usado comúnmente para operaciones menores, que en dosis altas puede generar intoxicación y alucinaciones similares al LSD. Recientemente, investigadores han encontrado que este medicamento podría aliviar rápidamente la depresión y eliminar los pensamientos suicidas. Ante este descubrimiento, te invitamos a conocer más sobre este fármaco.
¿Qué es la ketamina y cómo se consume?
La ketamina es un anestésico indicado para intervenciones diagnósticas o quirúrgicas que no requieren relajación muscular. Por lo general, es usada en intervenciones cortas, aunque también puede usarse en procedimientos de mayor duración mediante el uso de dosis adicionales.
Como anestésico se aplica vía intravenosa o intramuscular. En el mercado ilegal, los consumidores la esnifan, tragan, fuman e inyectan y consumen sola o en conjunto con otras drogas, como el éxtasis o la cocaína. No obstante, es importante mencionar que este tipo de consumo puede crear dependencia psicológica y problemas para afrontar la vida.
¿Qué hace la ketamina en el cuerpo humano?
Se piensa que la ketamina actúa como antagonista del receptor NMDA, que es el responsable de los efectos amnésicos, anestésicos y disociativos. Cabe mencionar que este fármaco se metaboliza en el hígado, donde se convierte en norketamina, un metabólico activo que tiene propiedades anestésicas potentes y que lo hace capaz de tener una vida media distributiva prolongada de entre 10 a 15 minutos después de una dosis por vía intravenosa estándar.
Efectos secundarios de la ketamina
Se ha visto que este fármaco puede generar algunas reacciones adversas, entre las que destacan:
- Aumento de las secreciones de vías respiratorias, atenuación mínima de los reflejos en vías respiratorias
- Frecuencia cardíaca y presión elevadas
- Isquemia miocárdica en pacientes con arteriopatía coronaria grave
- Alucinaciones
- Confusión
- Sueños vívidos
- Delirio
- Visión doble o borrosa
- Duración prolongada en pacientes con insuficiencia hepática
¿Qué contraindicaciones tiene la ketamina?
Esté fármaco está contraindicado en casos de:
- Psicosis
- Abuso activo de sustancias
- Insuficiencia hepática grave
- Enfermedad coronaria significativa
- Hipertensión no controlada
Por otro lado, está indicado para:
- Analgesia, en caso de dolor agudo después de una operación o dolor crónico
- Exacerbaciones de dolor agudo o crónico
- Sedación (ventilación mecánica)
- Sedación para procedimientos
- Intubación de secuencia rápida
- Depresión resistente al tratamiento
La ketamina en el tratamiento de la depresión
De acuerdo con investigadores de la Universidad de Exeter, en Reino Unido, la terapia con ketamina ofrece una alivio rápido y a corto plazo de la depresión y elimina los pensamientos suicidas y otros síntomas relacionados con problemas de salud mental.
Para dicha investigación se realizó una revisión sistemática de 83 informes publicados, de los cuales 33 eran revisiones sistemáticas, 29 ensayos controlados aleatorios, dos ensayos aleatorios sin placebos, tres ensayos no aleatorios con controles, seis ensayos abiertos y 10 revisiones retrospectivas.
El estudio aparece en British Journal of Psychiatry Open y asegura que el efecto más fuerte de este fármaco es vía intravenosa para aliviar la depresión. Así mismo se vio que se redujo la gravedad de la depresión unipolar de 1 a 24 horas y duró entre una y dos semanas, comparado con dosis orales que tardaron hasta dos semanas en surtir efecto.
También se observó que el alivio de la depresión bipolar fue rápido (cuatro horas después de la administración) y fue consistente durante 24 horas. Asimismo, se detectó que el efecto duró hasta tres días y siete días después todavía sentían alguna mejoría.
De acuerdo con Ozden Merve Mollaahmetoglu, coautor del estudio, “es realmente interesante que haya alguna evidencia de un efecto sobre pensamientos suicidas independiente a los síntomas depresivos. Este hallazgo es importante porque existe un riesgo de suicidio en varios problemas de salud mental”. También complementó que la ketamina es una droga segura en un entorno clínico, pues sólo así se pueden controlar los aumentos leves en la presión arterial y en la frecuencia cardíaca que se suelen presentar.
Las conclusiones deben tomarse con cautela debido al alto riesgo de sesgo de los estudios incluidos, además, la dosificación óptima y los modos de administración deben examinarse más a fondo.
Como se ha visto, la ketamina es un fármaco anestésico que también puede tener beneficios en el tratamiento de la depresión y otras enfermedades mentales. Sin embargo, debido a sus efectos alucinógenos, debe ser usado solo bajo supervisión médica.
Con información de Medical News Today, Cambridge University Press, Anesthesia Patient Safety Foundation y WebMd.