Hallan compuesto que podría combatir el melanoma
El cáncer de piel es el más común de los tipos de cáncer. Dentro de esta categoría, el melanoma representa sólo en 1% de los casos; pero es el que más muertes causa.
La American Cancer Society estima que, en Estados Unidos, habrá más de 96 mil diagnósticos en 2019, y aproximadamente 7 mil 230 personas morirán por este padecimiento.
La frecuencia de este cáncer es 20 veces mayor en quienes son de piel clara; sin embargo, en general, pueden ocurrir en cualquier parte del cuerpo también en personas de piel oscura.
Sus factores de riesgo son la exposición excesiva a la luz solar, fumar o antecedentes familiares.
El melanoma se origina en los melanocitos; las células cancerígenas continúan produciendo melanina, por eso crean lunares de color café o negro, aunque, en algunos casos, pueden tornarse rosados o blancos.
De acuerdo con los investigadores, el gen NRAS es el responsable de hacer que el melanoma se vuelva agresivo. Dicho gen codifica una proteína del mismo nombre con participación en la división celular.
En otras palabras, NRAS es un oncogen: al mutar, tiene la capacidad de convertir células normales en células cancerosas.
El melanoma con mutaciones NRAS representa entre el 20% y 30% de los casos.
Existen inmunoterapias y tratamientos dirigidos que logran mejoras en los pacientes; a pesar de ellos, para las personas con mutaciones NRAS, no resultan muy efectivas.
Ahora, una nueva investigación de la Boston University School of Medicine ha encontrado un compuesto farmacológico que podría combatir el melanoma.
Para llegar a éste, examinaron la reacción en cadena de los genes; también sus respectivas proteínas, que provocan las mutaciones NRAS.
Los especialistas sabían que NRAS actúa como un interruptor genético, el cual se activa y desactiva por otras moléculas; no obstante, desconocían cuáles eran las proteínas que desencadenan dicha reacción.
Tras varios ensayos para probar el efecto de varias proteínas en la actividad de NRAS, lograron reducir las opciones hasta llegar a una proteína llamada STK19.
Se dieron cuenta de que STK19 conduce a la hiperpigmentación de la piel y promueve la melanogénesis; es decir, promueve la síntesis de melanina dirigida por NRAS.
Según las observaciones del equipo, las alteraciones del gen codificador de STK19 estaban presentes en el 25% de todos los melanomas humanos. Por este motivo, sugieren que STK19 enciende el NRAS mediante fosforilación; y, como consecuencia, se activan otros genes.
Tras este hallazgo, los científicos diseñaron un inhibidor de STK19 y lo probaron in vitro e in vivo en cultivos celulares y modelos animales.
Ambos tipos de modelos revelaron que el compuesto ZT-13-037-01 puede inhibir NRAS y evitar el crecimiento del melanoma.
Con esa información, se abren nuevas posibilidades y estrategias terapéuticas para los melanomas con mutaciones NRAS.
El siguiente paso es realizar pruebas clínicas con humanos para comprobar su efectividad; hasta entonces, se deben crear medidas preventivas dirigidas con mayor precisión contra el melanoma.
Hace falta, indicaron los expertos, más monitoreo para el diagnóstico temprano, así como exámenes de todo el cuerpo que permitan detectar manchas problemáticas.
Además, es necesario crear estrategias que impulsen la proactividad de los pacientes para prevenir la progresión del cáncer y la metástasis.
Los resultados completos fueron publicados en la revista Cell.