Los psicodélicos y la salud mental: ¿drogas que curan la mente?
Desde 1940 ya se estudian los psicodélicos y la salud mental. Sin embargo, a medida que se incrementó su uso recreativo y fueron prohibidos, se dejó de investigar sobre ellos. Actualmente, los científicos han retomado las investigaciones sobre los efectos de estos tipos de drogas en la mente y todo parece indicar que algunas están demostrando un gran potencial para tratar diversos padecimientos.
¿Qué son las drogas psicodélicas?
Este tipo de drogas acusan alteraciones profundas en la percepción de la realidad. Cuando se consumen, las personas pueden ver imágenes, oír sonidos y sentir sensaciones que no existen. También suelen ser conocidas como drogas alucinógenas.
Lista de drogas psicodélicas
Dentro de las drogas psicodélicas más comunes se encuentran:
- LSD
- Mezcalina
- Psilocibina
- Ibogaina
- Éxtasis
- Ayahuasca
- Kentamina
La historia de los psicodélicos y la salud mental
El uso de las drogas psicodélicas en la medicina no es algo nuevo. Cabe destacar que en 1940 y 1950 había psiquiatras que recomendaban LSD para aliviar el dolor, la depresión y la ansiedad. Además, en 1970, algunos recetaban MDMA (también conocida como éxtasis).
La popularidad de la MDMA y que las personas comenzaran a utilizarla para usos recreativos hizo que fuera prohibida en 1985, lo que generó que se estancaran las investigaciones en esta materia.
Sin embargo, gracias a algunas organizaciones sin fines de lucro y algunos académicos (Roland Griffiths y David Nutt) es que, desde el 2000, se han retomado las investigaciones en materia de psicodélicos y salud mental.
Psilocibina: la droga que alivia la depresión
Dentro de los estudios más reciente de los psicodélicos y la salud mental se encuentra uno realizado por Roland Griffths y Stephen Ross, director clínico del Centro de Excelencia en la Adicción de NYU Langone, en el que se les administró psilocibina (componente de los hongos alucinógenos) sintetizada en un laboratorio a 80 pacientes con cáncer avanzado de Baltimore y Nueva York.
Cabe destacar que a estos pacientes se les dio la droga en un ambiente controlado y fueron acompañados con asesoramiento psicológico.
Como resultado encontraron que tres cuartas partes de las personas reportaron un alivio significativo en la depresión y en la ansiedad. Además, en la encuesta de seguimiento realizada a los seis meses después de tomar el compuesto, seguían reportando esta mejora en el estado de ánimo.
Los encargados del estudio aseguran que el hecho de que una sola dosis de medicamento tenga un efecto tan duradero es un evento sin precedentes en la psiquiatría. Sin embargo, reconocen que las drogas psicodélicas jamás deberían estar disponibles en los estantes de la farmacia.
¿Qué otras drogas psicodélicas han sido estudiadas?
La investigación sobre los psicodélicos y la salud mental ha aumentado en los últimos años. Algunos de los estudios más recientes son:
LSD y depresión
En un estudio llevado a cabo por Imperial College de Londres se encontró que quienes habían consumido LSD tenían memorias más positivas y la actividad cerebral en las zonas de las memorias negativas se veía disminuida.
Éxtasis y sociabilidad
Según un estudio realizado por la universidad de Chicago, el éxtasis aumenta la amabilidad, la alegría y los sentimientos de amor, además de incrementar la empatía y la sociabilidad.
Otro estudio publicado en el Journal of Psychopharmacology encontró que el éxtasis aumenta la compasión y reduce la autocrítica.
Ketamina y depresión
Actualmente, la ketamina es usada como anestésico y ha sido aprobada por la Food And Drug Administration (FDA) para tratar el dolor. Sin embargo, según un estudio de la revista Science, esta droga podría funcionar para tratar la depresión.
¿Por qué están resurgiendo los psicodélicos?
De acuerdo con la Organización Mundial de Salud (OMS), alrededor del mundo hay 450 millones de habitantes que padecen trastornos mentales y estima que una de cada cuatro personas en el mundo padecerá, en algún momento de su vida, algún trastorno mental.
Ante este panorama y el poco éxito en los tratamientos de algunas de las enfermedades es que varios investigadores han recurrido a buscar otras alternativas, entre ellas, el uso de psicodélicos.
De acuerdo con Shlomi Raz, cofundador y presidente de Eleusis (primera empresa en transformar los psicodélicos en medicamentos), los psicodélicos tienen efectos robustos y duraderos en la depresión. Además, podrían ayudar en el trastorno de estrés postraumático.
Esta compañía también asegura que el plus de usar este tipo de drogas es que parecen ser más seguras y no tener efectos secundarios como algunos otros antidepresivos.
Las investigaciones más recientes muestran que los psicodélicos podrían tener grandes ventajas en el tratamiento de enfermedades mentales. Sin embargo, todavía se necesitan más estudios para profundizar el tema y conocer si estas drogas pueden tener algunos efectos adversos a largo plazo.
Con información de Vox, Pharmaceutical Techology, Scientific American y El español.