Peligrosas coinfecciones por parvovirus-rotavirus en poblaciones caninas de México

Las gastroenteritis infecciosas en perros constituyen una causa bastante común dentro de las consultas veterinarias. Pueden ser ocasionadas por diversos patógenos- ya que hasta la fecha se han identificado unos 12 virus que pueden afectar a los perros, además de bacterias y otro tipo de parásitos o una combinación de estos, sin embargo, el parvovirus canino constituye el patógeno más frecuentemente diagnosticado. Constituye una enfermedad muy contagiosa y grave, ya que incluye vómitos, diarreas sanguinolentas y marcada deshidratación, que pueden descompensar rápidamente al animal.

Otro patógeno causante de gastroenteritis es el rotavirus canino, cuyo aislamiento puede darse tanto en perros clínicamente sanos o con trastornos diarreicos. En la clínica, existen diversos factores implicados en la variabilidad de los cuadros clínicos de parvovirus canino, entre los que se cuenta la asociación con otros virus gastroentéricos, como coronavirus y rotavirus canino, hallazgo que es relativamente nuevo en medicina veterinaria.

Sospecha de coinfecciones virales en México

Un equipo de investigadores pertenecientes al Centro de Investigación y Estudios Avanzados en Salud Animal (CIESA) de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma del Estado de México (Uaemex), realizó hallazgos que sugieren la presencia de coinfecciones de parvovirus-rotavirus, luego de estudiar a perros con cuadros entéricos de gran severidad.

El Dr. José Simón Martínez Castañeda indicó que en la década de los ochenta se identificó el primer caso de parvovirosis en perros mexicanos, época en que la mortalidad por este patógeno era mayor al 90%, cifra que en la actualidad ha disminuido aproximadamente al 10%.

En un reciente trabajo,  liderado por Martínez Castañeda- publicado en la revista The Journal of Veterinary Medical Science- se dió a conocer que el parvovirus canino constituye el 90% de los casos de cuadros entéricos en México, constituyendo la patología de mayor presentación en la población canina del país.

Sin embargo, en los últimos años se ha dado la aparición de cuadros clínicos de mayor gravedad, en los que, pese a desconocerse la causa exacta de este cambio en su manifestación, podría deberse a la presencia de coinfecciones, como las debidas a  parvovirus-rotavirus, que genera gran inquietud entre los profesionales y dueños de perros, ya que según indicó el investigador: “Los clínicos y los dueños están preocupados. Hemos observado que algunos perros con títulos de anticuerpos protectores contra la enfermedad —producto de la vacunación— o algunos perros que fueron anteriormente expuestos al virus en campo, pueden llegar a infectarse, incluso en algunos casos desarrollan cuadros clínicos severos, esto podría deberse a la presencia de coinfecciones”.

Diagnóstico de coinfecciones

La otra parte de la investigación- publicada en la revista Brazilian Journal of Microbiology– fue dirigida por José Simón Martínez, y consistió en la identificación de rotavirus en perros, por medio del empleo de técnicas de diagnóstico molecular, y posterior vinculación con cuadros entéricos, presentes en caninos de diferentes edades. Este trabajo se trata del primero en su tipo que se realiza en México.

Como resultado de este estudio, el equipo investigador observó que los perros infectados exclusivamente con rotavirus, presentaron un cuadro clínico más benigno, que incluía letargo, ligero dolor abdominal asociado a diarrea mucoide y en algunos casos leucocitosis. Por su parte, en los perros con coinfección parvovirus-rotavirus, manifestaron un cuadro entérico más severo, con un dolor abdominal muy intenso, diarrea mucoide o hemorrágica, además de leucopenia.

Impacto sobre la clínica

El diagnóstico inadecuado por parte de los médicos veterinarios puede jugar un papel desfavorable en el impacto clínico de la gastroenteritis, debido a su falta de experiencia en la identificación de rotavirus o en la determinación de un cuadro por coinfección parvovirus-rotavirus.

Este informe es crucial para que los profesionales del área presten más atención a este tipo de enfermedades y sus agentes patógenos, al considerar al rotavirus como un enterovirus de relevancia y  la coinfección con parvovirus como una posibilidad diagnóstica.

Impacto en la salud humana

Si bien no existe una convivencia tan estrecha entre humanos y perros, la presencia de rotavirus entre estos animales es un tema al que no se le ha dado la atención que corresponde a un agente zoonótico de esta importancia, ya que según explica Martínez: “El rotavirus es causa de diarrea en niños y animales jóvenes, pero los médicos veterinarios no ponemos mayor atención a la infección debido a que los cuadros clínicos en los animales no son tan severos y no producen una alta mortalidad. Sin embargo, en otros países ya se ha reportado la transmisión interespecies de rotavirus canino a humanos. Esto nos habla de la importancia que tiene el estudio del rotavirus canino en las poblaciones de perros en México”.

La importancia de estas zoonosis radica en que las poblaciones de los animales domésticos son afectadas por varios genotipos del rotavirus A, por lo que al darse coinfecciones entre los genotipos caninos y humanos favorecerían la aparición de nuevas variantes genéticas que generarían una cepa más infecciosa para los humanos, posibilidad que hay que evaluar a través de estudios y seguimientos genéticos, para ver si estas mutaciones se dan efectivamente entre estos grupos.

Epidemiología en México

El especialista indicó que en país no existen estudios epidemiológicos sobre virosis en perros, pese a que el mercado de productos y servicios que se ofrece para mascotas muestra un desarrollo considerable y constituye un gran aporte a la economía de México: “En países como Estados Unidos y México, se sabe que la economía que maneja la población de gatos y perros, por ejemplo, es mucho mayor que la que maneja la población de bebés. En nuestro país, la economía que deja la población de perros es importante, pero por su condición de mascota y no de animales de producción, los estudios de investigación no son una prioridad para esta especie. Sería importante realizar una búsqueda de nuevos virus que ya se han reportado en otros países y saber si circulan en la población de perros en el país”.

 Ver nota original del CONACYT aquí.