COFEPRIS aprueba reglamento para venta y uso de cannabis medicinal en México
Lo que se preveía desde hace varios meses es ahora una realidad médica en México. La marihuana medicinal, que ya había sido autorizada para pacientes con dolencias que mostraran mejorías al consumir medicamentos derivados de de esta planta, tiene ahora más permisividad que nunca.
El día de ayer se dio a conocer a través de la secretaría de Energía y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) la nueva reglamentación que regirá y controlará la venta y el uso de cannabis medicinal en México. Con esto, el gobierno mexicano de Enrique Peña Nieto se ha esforzado por concluir labores generando la mayor cantidad de apertura posible a la marihuana, siempre del lado médico.
En el documento de 12 hojas se establecen las formas en las que los medicamentos con componentes de la marihuana como el THC (tetrahidrocannabinol) serán distribuidos y recetados en el país. Haciendo un énfasis especial en determinar quienes podrán recetar un tratamiento de cannabis medicinal, dependiendo de los síntomas del paciente.
En el artículo 18 de este reglamento se establece que “únicamente podrán prescribir los medicamentos que contengan derivados farmacológicos de la cannabis, los médicos cirujanos, cirujanos dentistas o licenciados en medicina que tengan cédula profesional expedida por las autoridades educativas competentes y cumplan con lo señalado en las disposiciones jurídicas aplicables y con los requisitos que determine la Secretaría”.
Estos requisitos aún no han quedado del todo claros. Lo que sí se sabe es que prácticamente cualquier médico con cédula profesional podrá recetar un tratamiento de marihuana medicinal, dependiendo de los padecimientos que presente el paciente, y si es que estos pueden ser tratados con este tipo de fármacos.
Hace unos meses, el exgobernador del Estado de México regaló once tratamientos de marihuana medicinal a pacientes con cáncer y epilepsia.
Por el momento, no hay una lista completa de los padecimientos y enfermedades que las autoridades sanitarias aceptarán como aptos para ser tratados con este tipo de fármacos que incluyen derivados de la cannabis. Lo cierto es que el Gobierno Mexicano le ha abierto las puertas a la investigación de esta planta en territorio nacional, permitiendo por primera vez en la historia la siembra y cosecha de marihuana legal, siempre con fines científicos.
Dentro de las nuevas oportunidades, se permitirá también “la siembra, cultivo, cosecha, preparación, acondicionamiento, adquisición, posesión, comercio, transporte en cualquier forma, suministro, empleo, uso y consumo de la planta”, siempre y cuando se cuente con la licencia legal expedida por las autoridades de Salud. Lo que abrirá considerablemente el tablero de opciones médicas para tratar pacientes que presenten dolores severos o que requieran de un calmante como el cannabidiol, como es el caso de pacientes con epilepsias o Parkinson.
Además, se pretende frenar la dependencia a diversos opiáceos con los que se han tratado ciertas dolencias en el pasado. Como opción alternativa, los tratamientos cannábicos pretenden empezar a tratar síntomas de cáncer y ataques epilépticos. En naciones como Estados Unidos, ya se receta marihuana medicinal a pacientes con depresión, estrés post-traumático, migraña, lesiones espinales, entre otras.
Hasta el momento, no se ha determinado si el IMSS o el ISSSTE cubrirán este tipo de tratamientos de forma gratuita para sus afiliados. Lo cierto es que de manera privada, los pacientes podrán acceder a un tratamiento de marihuana medicinal sin ningún problema, siempre y cuando cuenten con su licencia vigente que les autorice el consumo.
Una de las principales trabas es el costo. Hasta el momento, un tratamiento de este tipo puede llegar a costar entre 6 y 11 mil pesos mensuales. Estos son los precios del cannabidiol, uno de los compuestos de la cannabis sativa más utilizados para tratar enfermedades como la ansiedad, los trastornos bipolares, epilepsia, esclerosis múltiple, dolores derivados del cáncer, Parkinson e incluso esquizofrenia.
Con la reciente permisividad de la siembra y cosecha en territorio mexicano, se espera que los costos bajen radicalmente. Las empresas que deseen importar medicamentos de marihuana medicinal de otros países deberán “contar con el registro sanitario del medicamento correspondiente, expedido por la Cofepris”. Además de contar con las instalaciones adecuadas y comprar productos que caduquen mínimo doce meses después de ser adquiridos.
Ahora, México contará con una serie de alternativas farmacéuticas para tratar a cientos de miles de pacientes que podrían encontrar en el THC o el CBD de la marihuana, una solución a sus padecimientos profundos.