Hospitales no se pueden afiliar al Seguro Popular por falta de medicamentos
Uno de cada tres hospitales de segundo nivel que solicitó incorporarse al Seguro Popular fue rechazado por no contar con suficientes medicamentos del cuadro básico o tener instrumental quirúrgico en malas condiciones.
Datos de la Secretaría de Salud revelan que 648 hospitales considerados de especialidad, solicitaron acreditarse ante la dependencia para dar servicio a los 57 millones de afiliados que tiene el programa, pero 232 de ellos no lograron dicha acreditación por fallas elementales.
Un informe de la Dirección General de Calidad y Educación en Salud, señaló que en 2017, 67 hospitales de 12 entidades hicieron el trámite ante la dependencia, pero 22 de ellos no avanzaron por falta de abasto e insuficiencia de medicamentos.
«¿Cómo espera un establecimiento de salud atender a los pacientes si no tiene niveles de abasto mínimos? Esto es parte de lo que se busca con la acreditación (…) Idealmente, esto debería estar para cualquier establecimiento de salud sin importar si están financiados por el Seguro Popular o no«, afirmó en entrevista Sebastián García Saisó, titular de esta dirección.
El rechazo a afiliar más hospitales se da pese a que el número de nosocomios no es suficiente para atender a la población.
Datos de la misma secretaría señalan que, entre 2004 y 2015, el número de afiliados creció 973%, mientras que el de los hospitales acreditados para prestar servicios médicos a esta población aumentó apenas 23%.
No obstante, por la cantidad impresionante en que aumentaron los pacientes, el número consultorios de primer nivel pasó de 2.2 unidades a 0.3 unidades por cada mil afiliados al programa.
La tasa de unidades de hospitalización del Seguro Popular es mucho menor al promedio que tienen los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que es de 0.03 hospitales de alto nivel por cada mil habitantes. Incluso México está todavía por debajo de otras naciones, como Chile.
Si bien las cifras no son alentadoras, la Secretaría de Salud ha insistido en que los hospitales cuenten con la infraestructura necesaria para atender a sus afiliados, pero también a los pacientes en general.
«No se les está pidiendo que tengan cuestiones de altísima tecnología o que van más allá de las posibilidades de los establecimientos de salud, sino que son cuestiones más bien elementales para garantizar la calidad y la seguridad en la atención de pacientes«, dijo García Saisó.
Los hospitales insisten en acreditarse ante la Secretaría de Salud ya que, al hacerlo, reciben millones de pesos del programa, dependiendo del número de pacientes que atiendan. De acuerdo con diversos estudios e informes financieros, los hospitales reciben entre 10 y 35 millones de pesos, según el número de personas y de atenciones médicas que dieron.
La falta de medicamentos e insumos quirúrgicos ha sido una constante en los hospitales y centros de salud, aunque más evidente en los que operan con el Seguro Popular, debido a la fiscalización de recursos que hace anualmente la Auditoria Superior de la Federación (ASF).
Desde la administración anterior y a lo largo de esta, la ASF ha denunciado los desvíos de recursos de los estados y de los hospitales, sobre todo en el gasto de medicamentos, insumos médicos y gasto en infraestructura.
El presupuesto de los servicios de salud está etiquetado para gastarse en estos rubros y que los hospitales cuenten con los insumos necesarios para atender a los pacientes. Sin embargo, el dinero no se gasta correctamente y los ciudadanos padecen la falta de insumos por los malos manejos de los gobiernos estatales.
A pesar de estos problemas, 11 mil 193 hospitales están acreditados ante el Seguro Popular de los 21 mil 637 que hay en el país.
Con información de Reforma.