Luis Manuel Gonzales el bebé de 28 kilogramos y su diagnóstico todavía incierto
Nació el 15 de diciembre de 2016 con 3.5 kilogramos y 52 centímetros, la talla de un niño de tres años. Es el caso del bebé Luis Manuel Gonzales quien junto con su familia vive en el municipio de Tecomán en Colima, México quien a tan solo 10 meses de edad ha alcanzado un peso de 28 kilogramos.
Este caso ha conmocionado a la comunidad médica mexicana e internacional por el acelerado proceso de crecimiento por el que ha pasado, pues a escasos dos meses de edad el bebé ya había llegado a los 10 kilogramos y en los siguientes ocho meses duplicó este peso.
Fue a los dos meses de edad cuando sus padres lo llevaron a recibir su primera vacuna cuando el pediatra les solicitó la realización de estudios médicos. A partir de ese momento la rutina médica del bebé se convirtió en visitar el hospital entre tres y cuatro veces semanalmente.
Aunque a la vista Luis Manuel se comporta como cualquier bebé de su edad con curiosidad y alegría hacía situaciones desconocidas, día a día sus condiciones físicas empeoran pues su hígado, pulmón y corazón son grasos, por su obesidad ha pasado a necesitar pañales de adulto y cambios de posición cada media hora además de que le es imposible gatear o caminar.
Esta situación no sólo ha causado afectaciones en el bebé sino que su madre Isabel Pantoja ha sufrido lesiones por levantar el peso del niño.
Con un salario de 4 mil pesos mensuales es imposible para el padre de Luis Manuel poder costear la cantidad de atención médica que el bebé requiere por lo que mediante las redes sociales han abierto una campaña de donación para financiar todos los costos derivados de un posible tratamiento que requeriría inyecciones diarias de 10 mil 600 pesos.
En la actualidad aún se desconocen las causas de su condición pero se espera muy pronto recibir los resultados que confirmen es causada por inflación celular ocasionada por falta de proteínas antinflamatorias durante su gestación. Esto explicaría el mal desempeño de la tiroides y glándulas suprarrenales siendo el uso de hormonas el tratamiento recomendado.
Otras posibles causas
Hasta no confirmar esta nueva teoría sobre un problema tiroideo, los pediatras sospechan que se pueda tratar del Síndrome de Prader-Willi, una enfermedad genética que afecta aproximadamente a 1 de cada 15 mil recién nacidos en todo el mundo.
Este síndrome causa alteraciones en el hipotálamo e hipófisis, lo que genera un alto riesgo en el desarrollo de obesidad mórbida a partir de la infancia así como también problemas de aprendizaje, conducta y psiquiátricos.
Este síndrome es causado por la falta del cromosoma 15 normalmente proveniente de la carga genética paterna al momento de la concepción, apareciendo de forma aleatoria sin necesidad de presentar antecedentes genéticos.
Algunos rasgos físicos que pueden presentarse en los individuos afectados por el síndrome de Prader-Willi son una frente estrecha, ojos almendrados, labio superior delgado y boca girada hacia abajo y manos y pies muy pequeños.
El primer síntoma de Prader-Willi es la incapacidad del bebé para succionar y alimentarse por lo que la mayoría de los pacientes de temprana edad requieren de asistencia externa durante la lactancia con dispositivos parecidos a los aplicados en bebés con labio leporino. De no atender este problema de manera adecuada el desarrollo del bebé se verá afectado en cuanto a su crecimiento.
Sin embargo en esta etapa debido al mal funcionamiento del metabolismo por el Síndrome de Prader-Willi el bebé no solicitará comida por la disminución de la necesidad de calorías que su organismo exige, por lo que los chequeos médicos son necesarios para ajustar la dieta y peso adecuado y sano.
Posterior a esto, el comportamiento del síndrome cambia y se convierte en hiperfagia y ausencia de la sensación de saciedad, produciendo importantes grados de obesidad desde edades muy tempranas. Incluso este problema puede llegar a complicarse causando asfixia, rotura del esófago, obstrucciones en el sistema digestivo, diabetes y el fallecimiento.
La falla en el sistema endócrino ocasiona baja estatura a causas de la deficiencia de hormona del crecimiento así como un desarrollo sexual incompleto y en la mayoría de los casos infertilidad.
De tratarse del Síndrome de Prader-Willi el bebé Luis Manuel Gonzáles deberá someterse a tratamientos y terapias durante toda su vida, pues no se conoce aun una cura definitiva para esta enfermedad.