Otorgan el Premio Nobel de Medicina a científicos estadounitenses por estudio pionero sobre el ciclo circadiano
Los premios Nobel para los logros destacados en los campos de la ciencia, la literatura y la paz fueron creados siguiendo la voluntad del inventor de la dinamita y empresario Alfred Nobel, desde el año 1901, utilizando como fondos la enorme fortuna de la que disponía, según especificaciones realizadas en su testamento.
El primer premio Nobel que se entrega cada año, tradicionalmente, es el de Medicina. Los galardonados dentro de esta categoría ha incluido a grandes científicos como sir Alexander Fleming, el célebre descubridor de la penicilina, y Karl Landsteiner, cuya identificación de los diferentes tipos de grupos sanguíneos inauguró el camino de la medicina transfusional segura.
El Nobel de Medicina de este año
La cronobiología, o estudio del funcionamiento del reloj biológico interno que nos rige, es ahora un campo prolífico de investigación gracias al trabajo pionero de tres científicos norteamericanos que explicaron el papel de los genes específicos que regulan nuestra respuesta diaria, según un funcionamiento muy delicadamente coordinado.
Este hecho reviste una enorme importancia, ya que muchos aspectos de la fisiología humana y la de todos los organismos multicelulares guardan una estrecha relación con el ciclo circadiano.
Estos científicos son Jeffrey Hall, Michael Rosbash y Michael Young, quienes fueron galardonados con el premio Nobel de medicina 2017 este día lunes recién pasado, si bien estos premios se entregarán el día 10 de diciembre. La suma que recibirán los ganadores asciende a unos USD 1,1 millones.
Según declaró la Asamblea Nobel del Instituto Karolinska de Estocolmo, Suecia, los reconocía por sus «descubrimientos de los mecanismos moleculares que controlan el ritmo circadiano”…»Desde que estos tres laureados realizaran estos descubrimientos trascendentales, la biología circadiana se ha convertido en un campo de investigación amplio y muy dinámico, con repercusiones en nuestra salud y bienestar«.
En palabras de Thomas Perlmann, secretario del Comité Nobel del Instituto Karolinska:»Esta capacidad de prepararse para las fluctuaciones diarias es crucial para todas las formas de vida«.
«Los premios Nobel de este año han estado estudiando este problema fundamental y resuelto el misterio de cómo un reloj interno en nuestro cuerpo puede anticipar las fluctuaciones diarias entre la noche y el día para optimizar nuestro comportamiento y la fisiología«.
Un poco sobre sus comienzos
En las décadas del sesenta y setenta, estos científicos ya estaban comenzando sus pioneras reflexiones y estudios dirigidos al concepto de los genes que controlan el reloj corporal. Rosbash y Hall comenzaron a trabajar en la Brandeis University, en Boston, hace más de 30 años para estudiar el ritmo circadiano en la mosca del género Drosophila.
En el año 1984, ambos fueron los primeros que lograron clonar el primer gen vinculado a la regulación del ritmo circadiano de este insecto.
En dicha época, la relación existente entre el reloj biológico y la regulación genética no era una idea muy popular entre los científicos, por lo que un aislado hombre de ciencia se encontraba embarcado en este proyecto: Michael Young.
En la Rockefeller University, durante tres décadas, Young ha sido un investigador que ha centrado sus esfuerzos el campo de la biología molecular y el carácter genético de los ritmos biológicos, utilizando una especie de Drosophila para llevar a efecto sus estudios.
Su papel fue esencial para poder establecer la relación existente entre los genes y el comportamiento, ya que sus investigaciones ayudaron a descubrir varios de los grupos de genes y las proteínas codificadas por éstos, que son las responsables de regular el ritmo biológico de esta mosca.
Algunas implicancias de este descubrimiento
Estos hallazgos cruciales ayudan a explicar cómo la gente sufre alteraciones en su fisiología cuando se desajusta su ciclo circadiano, como por ejemplo, en el caso de los viajeros que experimentan el jet lag o algunas de sus implicaciones más serias como en los desordenes del ciclo sueño/vigilia, que se manifiestan en cuadros de insomnio, la depresión y hasta en las patologías cardíacas.
Otras investigaciones se están llevando a cabo y han revelado el papel de otros genes involucrados en este complejo sistema. Esto ha llevado a que los médicos estén prestando mayor atención a las implicaciones de este ciclo circadiano, especialmente en aquellas personas que tienen patrones de sueño y de trabajo fuera del horario habitual, así como su efecto en los niños que se quedan despiertos hasta altas horas de la madrugada.
Actualmente, el trabajo de los científicos está explorando enfoques novedosos para nuevos tratamientos que involucren a los ciclos circadianos para poder beneficiar la fisiología de manera natural, como el establecimiento de los mejores horarios para la ingesta de medicamentos, haciendo a la vez un mayor énfasis en la importancia de patrones de sueño saludables.
En palabras de Christer Hoog, miembro del Comité del Nobel:»Estamos aprendiendo más y más qué sobre impactos no tienen que sufrir nuestro reloj»…»Si desobedeces constantemente tu reloj, ¿qué pasará? Sobre esto, se está llevando a cabo más investigación médica”.