Investigadores japoneses logran desarrollar óvulos humanos de forma artificial
Las dificultades de índole ético y legal en relación al empleo de embriones de origen humano para obtener células madre embrionarias, unido a la limitada capacidad de diferenciación de las células madre adultas, llevó a los científicos a intentar genera células pluripotenciales a partir de células del propio paciente.
La identificación que se viene haciendo desde hace un tiempo sobre aspectos clave como es el reconocimiento de algunos factores inductores de pluripotencia, ha servido como un elemento precursor en la investigación básica del desarrollo embrionario y la diferenciación celular.
Durante las últimas décadas, el promisorio trabajo con células madre ha avanzado a un ritmo tan vertiginoso que ahora estamos asistiendo al surgimiento de algunos de los primeros frutos que darán origen -si las normativas legales y éticas internacionales y propias de cada país lo permiten- en revolucionarias terapias del futuro, que tratarán enfermedades hasta ahora incurables y hasta podrán servir para alargar la esperanza de vida de la especie humana.
Dentro de estas amplias aplicaciones en la medicina, últimamente se ha estado explorando su capacidad para realizar el proceso de la gametogénesis humana in vitro, a partir de células sanguíneas de donantes humanos.
Antecedentes experimentales
En el 2012 se publicó en la revista Science una revolucionaria experiencia que informaba sobre cómo un equipo de investigadores japoneses logró producir óvulos y espermatozoides de ratón a partir de células madre. A continuación, estas células reproductivas fueron empleadas en la fecundación, llegando a obtener ratones bebés sanos como producto de la gestación. Esta era la primera vez en que se generaban óvulos de un mamífero a partir de células madre embrionarias.
Producción de oogonias in vitro
Este mismo equipo de científicos, tras continuar con sus investigaciones, vuelve a publicar en la revista Science, bajo el título “Generación de oogonia humana a partir de células madre pluripotentes inducidas in vitro” , un nuevo avance que sitúa a la ciencia a un paso más cerca de crear óvulos humanos in vitro.
El equipo comenzó utilizando técnicas comprobadas para transformar células sanguíneas humanas en células madre pluripotenciales (hPSC) provenientes de una mujer donante. Posteriormente, el trabajo consistió en inducir el desarrollo estas células, que llegaron a convertirse en células primordiales -similares a las células germinales humanas (hPGCLC)- pero sin llegar a un mayor grado de diferenciación, como sería el caso de una célula germinal madura.
Las hPGCLC se diferenciaron progresivamente en células inmaduras de tipo oogonia durante un cultivo in vitro a largo plazo (aproximadamente de cuatro meses), proceso que se efectuó en ovarios reconstituidos con células somáticas embrionarias procedentes del ovario de un ratón. Estas oogonias derivadas a partir de las hPGCLC evidenciaron las características bioquímicas normales de la reprogramación epigenética, además de adquirir un estado precursor inmediato para continuar con la etapa de meiosis.
Relevancia y proyecciones
Si bien estas células aún no pueden ser fertilizadas -por su estado de inmadurez- este hallazgo representa un gran avance y de hecho se lo considera uno de los trabajos científicos más relevante del año, ya que los resultados obtenidos demuestran que es posible conseguir los primeros estados evolutivos de un óvulo -las oogonias- a partir de células sanguíneas de una mujer.
Después de estos logros experimentales, los investigadores informaron que tienen planes de continuar con su investigación, con el objetivo de lograr que las oogonias obtenidas a través de estas técnicas, se conviertan en un cigoto viable. Además planean ampliar sus logros con la obtención de células espermáticas in vitro.
El debate ético
Estas investigaciones terminarán de manera inevitable en cuestionamientos éticos, que surgirán en el momento en que se consiga producir óvulos maduros, viables y listos para ser fertilizados a pedido.
Puesto que se podrán obtener con estas técnicas desde bebés fecundados con el material genético procedente de familiares o extraños, incluyendo los fallecidos. Obviamente, esto dará también la posibilidad de tener descendencia a personas infértiles o parejas que son del mismo sexo.
También esta técnica abriría la puerta a la posibilidad de crear gametos a partir de otras células, como por ejemplo la piel u otro tejido, obtenidos de prácticamente cualquier persona que pueda costearlo.
Algunos incluso han sugerido que un acceso tan fácil a los óvulos humanos podría llevar a seleccionar los embriones resultantes -según sus características genéticas deseables- para permitirles a los padres, o al gobierno, elegir cuáles pueden llegar a convertirse en seres humanos viables.
Si bien aún quedan varias problemáticas que resolver en este campo, los crecientes avances científico-tecnológicos están cada vez está más cerca de lograrlo, mientras que en el aspecto ético surgen nuevas interrogantes que, tarde o temprano, tendremos que resolver como un tema inquietante que involucra a toda la sociedad.